Un trabajo un tanto especial al ser algo que no habíamos hecho hasta la fecha.
Una vez más se nos presentaba ante nosotros el reto de lo desconocido, ya habíamos colocado carteles publicitarios con anterioridad y de diversas formas, pero esta vez era algo más complejo. Se trataba de un vinilo de seis metros por quince, estas medidas trabajando desde un elevador no suelen representar ningún problema, pero… No se podía acceder con ningún tipo de elevador hasta el lugar de trabajo al encontrarse este dentro de un centro comercial; y ahí es donde entrabamos nosotros.
Gracias a nuestros sistemas de trabajos verticales podemos acceder a cualquier punto y solucionar este tipo de problemas. Por otro lado, al estar suspendidos de nuestras cuerdas, la zona en la que podemos trabajar es únicamente vertical, lo que hace más difícil la forma de trabajar, otro hándicap con el que nos encontramos es con la dificultad de volver a ascender una vez que hemos empezado a bajar.
Entonces nos encontramos con que no podemos desplazarnos lateralmente ni tampoco ascender, esto como podréis imaginar dificulta muchísimo el trabajo. Al final y tras realizar varias pruebas, ideamos el mejor sistema de trabajo para poder solucionar el problema a nuestro cliente y poder colocar con total perfección el vinilo, que iba situado en la torre de cristal que formaba la estructura de uno de los ascensores del centro comercial. Por supuesto y como podéis observar en las fotos el trabajo se realizó fuera del horario comercial, es decir, de noche.
Altitud: La mejor solución con la máxima seguridad.